El sector primario de la agricultura, la minería y la ganadería no parece, a simple vista, que tenga mucho que ver con tecnologías como robots o drones, pero nada más lejos de la realidad. De un tiempo a ahora, los desarrolladores tecnológicos se están centrando en crear máquinas – e incluso aplicaciones – que faciliten el llevar a cabo cualquiera de estos oficios, además de que así también acercan tecnologías más populares en las grandes urbes a las zonas donde todavía no se han popularizado. Estos son algunos:
- IoT: el Internet de las Cosas también tiene aplicación en el ámbito rural. Por ejemplo, usando sensores que permitan hacer los cultivos más competitivos o aplicado a la educación y la sanidad en áreas aisladas.
- Inteligencia artificial: tiene una aplicación directa en la mejora de los cultivos y la gestión medioambiental, así como en la optimización de los servicios sanitarios y el uso de infraestructuras.
- Big Data: la ingente cantidad de datos generados en la actualidad permite analizar con precisión los cambios en el clima, el consumo de agua, los movimientos del ganado, el crecimiento de pastos y bosques, y otras informaciones esenciales.
- Drones: se pueden monitorizar de forma automática hectáreas de terreno recogiendo datos de temperatura, estado de las cosechas, movimiento de animales o controlar la extensión de las plagas, mejorando así el uso pesticida.
- Blockchain: permite aumentar la eficiencia, la transparencia y la trazabilidad en las cadenas de suministro agrícola y hacerla más productiva y sostenible.
- Robots: desde los tractores autónomos que no necesitan conductor hasta los robots capaces de recolectar uno a uno frutos delicados sin dañarlos, la introducción de robots en el ámbito rural está propiciando una revolución en eficiencia y sostenibilidad.
Aunque la migración a las ciudades es un proceso que no se detiene, las ciudades se tienen que volver más sostenibles, consumir menos recursos y ofrecer una mejor calidad de vida.
Una parte de ese proceso pasa porque no sean la única opción, y sea también posible vivir, disfrutar de buenos servicios y prosperar en el entorno rural. Con un pequeño empujón, los pueblos inteligentes pueden ser parte de la solución.
MB3-GESTIÓN está muy familiarizado en el análisis y propuesta de soluciones adaptadas a cada entorno; en el diseño de casos de uso para el aprovechamiento de los datos generados por las empresas y las personas con el fin de mejorar la información de la que disponen las Administraciones, haciendo posible la mejora de los servicios que prestan.